miércoles, 28 de julio de 2010

POEMAS DE VIVIANA RESTREPO



SANGRE

1
PRIMIA SANGRE

Seguiré besando esta guerra de sangre
hasta descubrir en el abismo del cuerpo
todos los misterios de la voz.
Esa que grita y calla
esa que aturde el interior de la vigilia con su profecía
esa que me convierte en sal.
En hierba amarga.
Y con un solo pie
besaré una vez más esta guerra abismo
todos los misterios del cuerpo de la voz.

2

Te he dicho de mi nombre.
De lo que he sido en el oscuro lenguaje.
De mi edad y mi sangre.
Te he hablado del horror que hay adentro de mi empañado espejo
Y has visto como brota el llanto
Como se encoge el cuerpo cuando la boca enmudece…
¿Cómo descifrar tu mirada
¿Cómo?
Tú, círculo de silencio.


OFICIO DE ESCRIBIR

1.

GIRO

Yo digo polvo
y ya no es el verbo
sino la nostalgia del adiós.
…Me gustan las puertas
y lo misteriosa que puede ser una pregunta y el sueño tibio.

Infértil
hablo de los que están condenados a la ceguera eterna
de los que tienen la hierba húmeda y no ardiente.

Yo digo aridez
y ya no es boca, es hueso calcinado.
Arena amarga.
Reseco
hablo del retorno de las voces
de la antigüedad del silencio
Ahora yo digo palabra
y no es más.
Es piedra sacra.
Triangular.
Liviana.
Negra.


2.

No sabes leer
las líneas de mis manos
Ni pensar mi lengua
que arde detrás de mí
Tu raíz es otra.
Estás al otro lado de la luz.
Tienes un ojo anclado en el rostro
solo un ojo para ver lo indescifrable
Un ojo rojo…
¿Cómo ver la forma del fuego
que ha sido robado al dios?
¿Cómo?
Si tu mano ya lo escribió
y no lo he visto aún.


3.

al que va por los ríos del sur.

El libro que me has ofrendado lo guardo junto a mi corazón.
Estás allí desmembrado en cada página.
En cada línea una parte de ti.
Entre una hoja y otra la claridad:
tu sepulcral silencio y divino altar.
Eres un escritor de palabras vivas que evocan lo antiguo.
Las llevas en la piel
con ellas buscas respuesta al enigma que gira en tu memoria:
Nostalgia del pasado que rompe el círculo.
Espejo del presente que atraviesa la línea.
La visión del deseo que rema en espiral…


4.

En el libro llueve
y no hay rastro de ceniza en el cuerpo.
Dios bendijo tu semilla
para que opacaras mi maldición.
Pronuncia las palabras benditas
y se dibujarán estrías negras
sobre los ojos
y por debajo de la piel
donde no llega aún la sed
ni el agua para saciarla.
Ya no sé qué escribo.
Puedo mirar muchas veces el sol
y no sufrir
porque tengo estrías negras en los ojos
y una sed que no se acaba
ni se sacia
con el agua lluvia del libro.



VOCES

3.

Hablo de las puertas
y me entrego al laberinto de arena
a la mortaja de la lengua.
Me pesa la sal.
Tu oído no escucha ya
mi grito
ni el temblor.
El misterio es latente.
Después del silencio
se abre la puerta:
muestra su desnudez
y
tus ojos blanqueados.



LA DESPEDIDA

1.

PRESENTIMIENTO

“I cannot tell the mysteries of time”


Omar Khayyam

Yo vigilo tu pie
desde mi ojo ciego
desde mi puerta clausurada al tiempo.
Y tú en el círculo negro dibujas pájaros del desierto
con tierra amarilla
y piedras ajenas.
Sé que deseas el agua salada
la muerte de las horas…
Darás paso a las sombras.


2.

AL OTRO LADO

“Todo como si nada: ¡Ni la memoria!
Tu cara es la memoria.”


Mohammed Al-Nabhan


Te vas
y tras el vidrio
el humo negro.
Parecido al exilio
es tu caída.

Tu cuerpo se vuelve sombra
y tu lengua
se divide ahora en tres:
En el deseo.
En letra de Primia Tierra.
En el círculo que te amarra a mis pies.
Grito tu nombre
con sabor a oriente.
Con olvido en las manos
con tinta
y tu imagen en la frente
también me voy.


3.

RECUERDO

           Si sólo la sombra de tus ojos fuera un oráculo en medio del mar

           las bocas de la tierra no me hubieran tragado.

No remes en mis aguas.
No salgas en busca de otras tierras desde esta orilla, no tendrías como sujetarte.
No tengo un puerto seguro.
Los cuerpos que se han acercado a mi isla mudan de piel y parten a buscar un nuevo rostro.
Un día se acercó un ser que estaba sediento, había venido del desierto y encontró aquí un manantial
para su necesidad, se marchó cuando su vasija estuvo rebosante.
Otro que practicaba la magia halló en mí un nuevo truco y salió a mostrárselo al mundo.
Hay un tercero, su arte era contar historias, amaba el vino, la sensualidad y los viajes, vivió aquí lo que dura un eclipse, luego partió a la selva…
Han pasado los años y ninguno de esos espíritus ha regresado, sin embargo tres líneas se dibujan en el
horizonte cada que quiero irme.




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Viviana Restrepo Osorio (Medellín 1985)

Promotora de lectura, ha trabajado en el sector cultural de la ciudad y con la corporación de arte y poesía Prometeo. Poemas suyos han sido publicados en las revistas, Punto Seguido, Prometeo (memoria del XVI festival internacional de poesía de Medellín), Asfódelo y en la página web las elecciones afectivas.

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